Cuando las cosas cerraban redondas, Broom Mamm se reía hasta que alguien lo escuchara y se metía toda la cuchara con dulce de leche entre las fauces para hacerle cosquillas a la lengua. Después erutaba con algo de esfuerzo y volvía a pedir cartas. También era la señal para que Petizzo Machingo se levantara disimuladamente, pidiera su saco y las bolsas de supermercado que había dejado en la entrada, y se fuera del lugar para nunca más volver en su breve vida. En quince minutos también Broom Mann después de dos bostezos intentaría asentar verticalmente sus 147kg para salírselas con la suya, antes él se acomodaba el revolver lo que también quería decirle a Lachica que comenzara a bailotear libre de ropas sobre la mesa para procurarse una partida sigilosa.
Entonces Broom Mann se tropieza en la puerta, para que después de un molesto silencio se empiecen a caer las rizotas y también dos cuerpos que se reían y tres balas de Broom Mann, Lachica se da vuelta para mirarlo y disfrutar la única oportunidad de reírsele también. Entonces se le va a encajar una bala entre los ojos y quiere decir algo que sólo él entiende, ahí es donde también del bolsillo se le cae el anillo, Lachica queda muerta en el sótano.
Lachica (tres años atrás había reconocido a Broom Mann en una foto antes de conocerlo dentro de la lancha en la que también viajaba Allanardaez mucho antes de que le soltáramos la piedra arriba de la cabeza estropeándole así de una vez por todas su ordinaria vida. La lancha había sido del mismísimo Doctor Henning, quién después de presentar unos a otros mezcló los pupos desnudos de todos para que nunca más nadie vuelva a dar comentario alguno de las figuras que formaban sus cuerpos entre los otros cuerpos esa misma noche).
Lachica también tenía una hermana idénticamente gemela que también trabajaba para Broom Mann e intentaría devolverle el balazo dos meses después mientras cada uno de los dos todavía desnudos en la cama hacían fuerza para despertarse. Broom Mann abrió los ojos primero, vio a Lachica a su lado con el revolver dormido en la mano dormida que se quería despertar y no podía. La besó en los labios se vistió sin hacer el más mínimo ruido y se fue para nunca más volver a entrar por esa puerta. Lachica todavía dormía. Broom Mann había escapado por última vez.










Y tuvo que girar la cabeza dos veces esperando que por fin de atrás lo siguiera alguien, por que algo se olía, y por los cuetes en el aire, el equipo de la ciudad había campeonado en las canchas de todo Bozzo. Pero era adelante para donde tenía que haber mirado, por que no vió cuando se comió otra panza que tampoco lo había visto, para que entonces los dos quieran escupir primero, y después ninguno y para que la cosa se ponga fulera y se crucen las putos desde la Calle Humbolt, para entender porqué un gordo le pega con la culata de un hacha en la cabeza a otro gordo que está desparramado en el piso con ganas de no volver a levantarse, y porqué este tarda tanto en morirse, hasta que por fin se muere.

-Lo que nadie espera es que te ami omm, dice pero se muere.
Lo que sabe ahora es que la panza inerte era la misma donde solía encajar su revolver Broom Mann, y que alguna vez también le tenía que tocar, y que todo el negociado se iba al tacho con Broom Mann en un pozo esperando que se le pudra la carne para invitar a los gusanos.



Lachica encajada en una peluca violetacea se deja sobre la mesa.
-No sabía que usted también usaba barba, General.

El General James Spatarraga deja la gorra en un banquito, le estira la mano derecha para saludarla, y con la izquierda le toca la teta derecha.
-No sabía que el señor Broom Mann brindaba estás atenciones de tan buen gusto a todos sus clientes.
-Yo tampoco General James Spatarraga, y hasta donde sé, Broom Mann tampoco.
-Entonces nadie va a entrar por esa puerta para reventarme los cesos contra la mesa?
-Nadie. Qué espera para morderme la toronja?

Y un rato después, una sombra gorda entra por esa puerta, y por detrás, el cuchillo de Broom Mann que entra dos veces entre las costillas y le pinchan un pulmón al General James Spatarraga.

-Eso es saber cortar, te queda lindo hijo de puta(Festeja Broom Mann).
-Ahora, me voy por la ventana, pero alguna vez te la va a tocar Broom Mann.

Se escapa como puede rompiendo la ventana y pierde un pulmón y un brazo antes de viajar en avión hasta un lugar marginado en el medio de la nada donde encuentra un barrio de montañas de restos edilicios abandonados.
Por que alguna vez a alguien se le habrá ocurrido construir una casa para arriba y a otro ponerle otra arriba, sin preguntarse todavía por qué los marcianos construyen para abajo.

-Será porqué los edificios se caen?

Ahí se viene a quedar, para empezar poniendo una cortina confeccionada básicamente a base de alambres y escarabajos muertos, para después pintar un cartel entre los desperdicios (dibujado con sus propios desperdicios) que ahora constituían su nuevo establecimiento:
Acá no vive nadie al que quiera verle la cara.
Ladrillos, tres puertas, dos montículos una pared cortada, ladrillos, cuatro atados de fierros, ladrillos, una parded y una esquina de chapas después, también había un techo y dos columnas adelante con otro cartel:
DOC. SERGIO XAMDERMAN MAT.233543
Y supongamos que el verdadero doctor estaba de seis a diez metros por debajo de esos mismos escombros, enterrado hace catorce o quince años, y que uno de Los dos MONIGOTES que ahora se lo miraba solo y se decía Doctor Sergio Xamderman y también vivía entre las habitaciones huecas que había dejado los edificios en el piso.
-Decían que esta ciudad era la ciudad con más cantidad de edificios de ladrillos vistos en todo el mundo (se animó a decirle un día a su vecino por primera vez).
-Eso explica la cantidad de ladrillos.
Por lo visto, alguna vez antes los dos habían frecuentado otro estilo muy distinto de vida, en el que también un día se habían visto las caras, sólo que en aquella oportunidad no se habían animado a dirigirse la palabra.
Hasta que uno no comentara como es que fue a parar a un lugar como ese el otro tampoco decía nada, por fin ambos subrayan un nombre Broom Mann, y desde sus cuevas de ladrillos vistos comienzan una lenta planificación de un plan que dieciséis años más tarde lograría garantizarle venganza contra la mismísima panza gorda de Broom Mann.-
Después se los come una infección y al mundo se lo chupa un agujero negro.